La homeostasis, la importancia de los rangos para la vida.

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La homeóstasis          es la autorregulación que emplea el organismo para la conservación del equilibrio del medio interno (lo que rodea la célula, plasma sanguíneo y liquido intersticial) es decir, es la mantención de condiciones que son adecuadas para el organismo, tal como la temperatura corporal, el PH, niveles de oxígeno, CO2, etc.

La homeóstasis se ejecuta mediante el sistema nervioso, y es gracias a su mantenimiento y búsqueda del equilibrio que nuestro organismo logra mediante diversas respuestas mantenernos en condiciones adecuadas. Todos por experiencia sabemos que posterior a la fiebre viene la sudoración, o que esta finaliza después de sudar, pero… ¿A qué se debe dicha sudoración? La respuesta es brindada por la homeostasis, cuando tenemos fiebre (Temperatura ≥ 38) nuestro organismo mediante termoreceptores (sensores de temperatura) encontrados en la piel, captan el desequilibrio de la temperatura corporal, es decir, el aumento de la temperatura, por lo cual como respuesta el organismo genera termólisis (perdida de calor) en este caso, generando sudoración produciendo que el agua secretada por las glándulas sudoríparas de nuestra piel, produzca refrigeración del cuerpo o una disminución de la temperatura, todo en la busca del equilibrio para regresar a los valores normales la temperatura (36-37).

Los rangos de muchas variables en nuestro organismo son vitales, para una vida en buenas condiciones, solo la alteración de alguno de estos puede llevar a múltiples consecuencias negativas, y algunos incluso a la muerte, por eso es de gran importancia llevar una vida que se limite a no propasarnos de lo normal. El ser humano es una “maquina” tan desarrollada que logra adaptarse en algunos casos a condiciones extremas (lo que se conoce como alostasis) como adaptarse a cambios climáticos, de altura, enfermedades (obesidad, diabetes, hipertensión, entre otras), etc. lo cual, a pesar de ser una respuesta para permitirnos vivir adecuadamente, fisiológicamente afectan al organismo produciendo consecuencias negativas a corto y largo plazo. 

En resumen, la homeostasis es vital para la vida, la mantención y regulación adecuada de todos los parámetros del organismo, como la presión arterial, la filtración renal, la frecuencia cardiaca, la frecuencia respiratoria, la temperatura, PH, Osmolaridad, etc. son componentes claves para un adecuado funcionamiento en todo momento del diario vivir de cada persona.