La poesía está más allá de los versos que la materializan. Ese parece ser lo que palpita en los memorables versos del poeta Gustavo Adolfo Bécquer, cuando, revestido de una profunda sensibilidad escribió en su rima XXI:
¿Qué es poesía?, dices, mientras clavas
en mi pupila tu pupila azul,
¡Qué es poesía! ¿Y tú me lo preguntas?
Poesía… eres tú.
En esta bien lograda alegoría, Bécquer condensa la esencia de la mujer. La mujer no solo como motivo de poesía, sino también, como creación poética. Y esta hermosa dualidad: mujer-poesía, tendrán un contacto de nuevo, en el XXVII Encuentro Nacional e Internacional de Mujeres Poetas de Cereté, el cual se desarrollará del 3 al 8 de noviembre de 2020. Será un evento ajustado a esta “nueva realidad” que nos ha forzado la pandemia, realizándose desde escenarios virtuales, y como siempre, con invitadas internacionales. El encuentro de Cereté nuevamente le apuesta a la poesía, más allá de sus fronteras. Ana Martín Puigpela, poeta española, ha definido a este municipio con especial admiración: «Cereté es un verso interminable, y sin embargo es un lugar que existe, una ciudad que acoge, un festival de poesía escrito por mujeres, un click en el corazón para que la mirada entienda»
En las anteriores versiones de este certamen, he disfrutado con la magia de unos versos revestidos de un fresco lenguaje; poemas trabajados con la paciencia de unas artesanas de la palabra que no dejan de reclamar —con sus versos subjetivos y profundos— su lugar significativo en el universo, como lo dice la colombiana Clara Schoenborn en su poema Declaración de Identidad:
“Soy Mujer
y no sé qué hay por inventar
si hay guerras justas
no sé si vive una mujer en mí
no sé si tenga género esto que soy
o soy un desecho de algo…”
En otra ocasión me he deleitado con textos construidos con palabras e imágenes triviales que van conduciendo al lector a esa trascendencia que está más allá de sus líneas, como lo expresa Ketty Blanco, en su poema Ser:
“El helado se derrite en mi mano
Una gota cae sobre el vestido
La dejo ser
Las religiones se disputan el Ser
Los filósofos discuten sobre el Ser
Mientras
una mancha oscura
es
en mi ropa”.
A propósito de sus creaciones literarias esta poetisa cubana expresó: «En mi literatura he iniciado un camino hacia mí misma, y ese camino en dirección a mí me ha ayudado a buscar lo que es particular en mí, lo que yo pueda tocar y ver, y de lo cual yo puedo hablar, y que a la vez te toca a ti».
Otra autora que también nos deleitó con su poética, en anteriores encuentros, fue la Noruega Marit Kaldhol, quien además escribe literatura infantil, y reconoce que: «Cuando escribo me gusta simplificar y comprimir lo que voy a decir, y para eso trabajo mucho con el lenguaje con el cual expreso cosas complejas, pero de una manera muy sencilla».
Varias serán las mujeres poetas que harán un alto en su hogar, para hechizarnos con sus silencios y sus palabras untadas de amor, de desamor, de rebeldía, y de las complejidades del ser; o como nos dijo la española Ada Salas: “Creo que, igual que la vida normal también a veces es tan importante o más, lo que no se dice, que lo que se dice, es decir, el silencio es significativo también, hay mucho del poema que no se ve, pero el silencio está debajo».
Poesía trasformada en mujer, la degustaremos desde casa, en este XXVII Encuentro Nacional e Internacional de Mujeres Poetas de Cereté 2020.